
Para asegurarse de que su e-step permanezca en las condiciones adecuadas, naturalmente necesita el mantenimiento adecuado. Pero, ¿qué tipo de mantenimiento y cómo debe hacerse exactamente? Te lo explicamos en este blog.
¿Por qué hay que realizar el mantenimiento de un e-step?
Consejos de mantenimiento para tu patinete eléctrico
- Cárguelo regularmente (no menos del 10% y al menos el 50%).
- Comprueba la presión de los neumáticos
- Evite conducir bajo la lluvia o la nieve tanto como sea posible.
- Revise los pernos y tornillos.
- Mantenga el scooter limpio.
La batería
A lo que más te tendrás que enfrentar en el ámbito del mantenimiento de un patinete eléctrico es al cuidado de la batería. El uso incorrecto y los malos hábitos de carga pueden acortar significativamente la vida útil de la batería. Le explicamos cómo puede obtener toda la potencia y la vida útil de la batería.
Usa el cargador oficial, un cargador no oficial puede dañar la batería. Así que no ahorres en el cargador porque lo barato puede salir caro.
Deja la batería no drenar por completo, Para una mayor duración de la batería, le recomendamos que nunca deje que la batería se agote por completo. Intenta siempre mantener la batería por encima del 10% (idealmente por encima del 50%).
No cargue la batería más tiempo del necesario, mantiene el tiempo de carga especificado por el fabricante. Exceder este tiempo de carga puede resultar en un sobrecalentamiento de la batería.
Cargue la batería antes de almacenar el scooter por un período de tiempo más largo, zAsegúrese de que la batería esté cargada al menos al 50 % antes de guardarla. Los propios fabricantes recomiendan cargar la batería al menos una vez cada 30 días durante largos periodos de inactividad.
Evite las temperaturas extremas, las baterías de los e-scooters no responden bien al calor o al frío extremos. Estas temperaturas tensan la batería y evitan que se cargue de manera eficiente.
Presión de llanta
- Su velocidad no es óptima.
- Menor resistencia a la rodadura.
- Su batería se agota más rápido.
- Costos innecesarios para llantas nuevas.
- Mayor probabilidad de dañar las llantas.
- La dirección puede volverse más peligrosa.
- Posibilidad de un viaje incómodo.
- Costes innecesarios de neumáticos nuevos.
- Riesgo de que se produzca un desgarro en el neumático durante la conducción
Lluvia y nieve
Los pernos y tornillos